jueves, 11 de marzo de 2021

LOS 4 FANTÁSTICOS: IMPENSABLE.


LOS 4 FANTÁSTICOS: IMPENSABLE.

El Dr. Doom ha sido el más acérrimo enemigo de los 4 Fantásticos desde su primera aparición y es uno de los más temibles por su poderío e ingenio que está al nivel de Reed Richards y de otros grandes científicos del Universo Marvel, a lo que se suma su odio acendrado hacia Mr. Fantástico, a quien considera el culpable de su tragedia por envidia, pues “manipuló” su invento que fue lo que desfiguró su rostro estando en la Universidad y lo obligó a usar una máscara.

Sin embargo, no siempre fue así. Hubo un tiempo, durante su juventud en Hungría, que recorría con su padre y la tribu gitana, en que conoció la felicidad al enamorarse de la joven Valeria, quien se convirtió en su mundo, tras morir su padre y descubrir el legado de su madre, que había sido hechicera. Valeria estuvo junto a él, mientras experimentaba y aprendía no solo sobre ciencia, sino también sobre artes oscuras. Pero su relación terminó, cuando los inventos de Víctor lo hicieron famoso y le llegaron ofrecimientos de becas para que estudiara en las más prestigiosas universidades y tuviese acceso a los más modernos laboratorios de experimentación. Entonces decidió viajar a USA; pero, Valeria no estaba dispuesta a acompañarlo, pues no deseaba abandonar sus raíces familiares y le pidió elegir entre irse o quedarse con ella. Nunca más volvieron a verse y Doom se transformó en un joven amargado, que fue el que conoció Reed en sus años universitarios. Y luego vino la tragedia y su transformación en Dr. Doom y su ascención al trono de Latveria.

Pero ahora, parecía querer dejar todo atrás y recuperar el amor perdido, así que se dedicó a buscar a Valeria, a quien finalmente encontró en un pequeño pueblo de la Florida en USA. Doom le ofreció dejar todo atrás si ella volvía con él, dejar de ser el monstruo al que todos temían. Le mostró un relicario que tenía fotos de ellos cuando estaban juntos. Al principio, Valeria no le creyó; pero, luego vio en sus ojos que había un verdadero deseo de cambiar en nombre del amor, así que le extendió su mano.

Algo ocurrió en ese momento, pues el relicario empezó a brillar y el cuerpo de Valeria empezó a deshacerse, en medio de gritos de dolor. Doom confesó entonces que buscando ser aún más poderoso, contactó con demonios del inframundo que le ofrecieron lo inimaginable; pero, para ello, debía haber un sacrificio, un canje con algo de valor indescriptible e irremplazable para él: Ella.

La piel y la carne de Valeria desprendidos en jirones, rodearon el cuerpo de Doom hasta conformar una armadura mística que lo haría invencible. Ahora, ella estaría para siempre con él y permitiría su triunfo definitivo sobre los 4 Fantásticos. Doom había hecho lo impensable y estaba dispuesto a más. Para ello, no obstante, sería crucial la participación de otra Valeria: la pequeña hija de meses de edad de Reed y Sue.

Y es que había sido Doom quien había ayudado a nacer a la pequeña en ausencia de Reed, cuando la vida de la madre y la bebé estaban amenazadas por la energía de la Zona Negativa y por ello, había exigido que la pequeña llevase el nombre de Valeria, en homenaje a su amada y había aprovechado para murmurar una serie de hechizos sobre la niña, para usarla como instrumento de su venganza, cuando fuera el momento.

Y ahora lo era. Toda la familia estaba a la espera de que la pequeña dijese su primera palabra y grande fue la sorpresa de Sue y Ben, que estaban en ese momento con ella, al escucharla decir Doom. De inmediato pensaron decirle a Reed, sin sospechar que Mr. Fantástico, la Antorcha Humana y Franklin estaban bajo ataque de una misteriosa energía. Reed quiso poner a salvo a su hijo teleportándola a Attilan; pero, al abrir el portal, el niño quedó en manos de demonios intradimensionales.

Johnny intentó rescatar a Franklin; pero, solo consiguió que uno de los demonios le quemara su pierna derecha con una llama mística. Ben y Sue llegaron y contaron lo ocurrido con Valeria. Reed se dio cuenta que Doom controlaba a Valeria, pues sus ojos se habían vuelto rojos e increpó al villano llamándolo cobarde, por usar a los pequeños y lo instó a presentarse y dar pelea cara a cara. Doom contestó por medio de Valeria, diciendo que muy pronto sería así.

Mientras tanto, la energía mística ocupaba todo el edificio Baxter, anulando todo artefacto científico y los medios de defensa y empezaba a desbordarse hacia la ciudad. El grupo abordó entonces una nave experimental y llevó armas que Reed había creado para casos extremos, dirigiéndose entonces hacia Latveria. Ben pidió ayuda a Dr. Strange; pero, este ya había sido controlado por los demonios y contestó dándole poca importancia al hecho.

Entretanto, Doom hablaba con los demonios y les dejaba en claro que eran sus aliados y no sus amos, a lo que los seres le contestaron con una macabra sonrisa, diciéndole que en efecto, así era.

Al llegar los 4F a Latveria, se enfrentaron a Doom; pero, al usar este medios místicos, todos sus esfuerzos resultaron inútiles. Doom encaró entonces a Reed, retándolo a que usara su genio científico para vencerlo. Por primera vez, Reed no sabía que hacer, pues su mente era científica y poco sabía de la magia, a pesar de haber enfrentado antes amenazas místicas.

La respuesta de Reed fue pedir a Ben que tomara en sus brazos a la pequeña Valeria y huyese en busca de refugio, mientras los otros 3 atacaban a Doom con todas sus fuerzas y con las armas que habían llevado, lo que por un momento pareció dar resultado; sin embargo, pronto se dieron cuenta que todo era un engaño del villano, que ahora teleportaba a la niña hasta sus brazos. Ben reaccionó dando a Doom un puñetazo tan fuerte, que aparentemente le rompió el cuello y giró su cabeza 180°, lo que tampoco tuvo efecto.

Doom conjuró entonces la imagen de Franklin en el infierno y les dijo a los 4F que lo liberaría si se rendían, pues ellos sabían que él siempre cumplía con sus promesas. Los héroes se rindieron; pero, Doom no liberó a ninguno de los niños y capturó a los 4F, llevándolos a su castillo, donde los sometió a torturas, justificándose en que todo lo que padecerían era culpa de Reed, por su actitud envidiosa y egoísta. A Ben, unos monstruos sin cerebro lo golpeaban una y otra vez, arrancándole pedazos de su piel de piedra; a Johnny le dio cuerpo elástico, estirándolo al máximo; a Sue, la hizo encenderse; y, a Reed, lo encerró en una inmensa biblioteca repleta de libros místicos, retándolo a que aprendiese lo necesario para liberarse e intentar vencerlo.

Desesperado, Reed tomó unos libros; pero, al rato los lanzó furioso al suelo, pues no entendía nada. Uno de los libros golpeó una vela que había en una mesa y esta cayó al suelo. Curiosamente, la llama escribió un mensaje: El conocimiento no lo es todo.

De pronto, la sala se alborotó; libros y hojas volaban por todas partes y de uno que cayó abierto, emergió la imagen astral de Stephen Strange, pidiendo a Reed que pronunciase el encantamiento que lo liberase, lo que consiguió hacer con voz entrecortada y permitió al místico manifestarse por completo. Dada su experiencia y a pesar del ataque de los demonios y que estos habían llevado su cuerpo hasta el castillo de Doom en Latveria donde lo torturaban, consiguió proyectar su imagen astral. Sin embargo, para liberarse del todo, dependería que Reed pudiese manejar los encantamientos.

El problema era que dado que Reed no creía en la magia, al pronunciar los encantamientos, lo hacía mecánicamente, sin convencimiento. Si el sencillo hechizo para teletransportarse al santuario de Strange (que no podía hacerlo este sin su cuerpo físico), casi fue fatal para Reed, pues al no ser adecuadamente pronunciado, los dejó en la calle y Mr. Fantástico se salvó con las justas de ser atropellado por un auto y si no resultó afectado, fue porque recuperó sus poderes tras salir de Latveria. Pero el héroe no tendría esa ventaja en un enfrentamiento con Doom, ya versado en las artes místicas y la magia oscura, si no formulaba los encantamientos apropiadamente. Y el problema era que Reed seguía cerrado a entender la magia. Según él, había ejecutado el hechizo con precisión; pero, en la magia, hacía falta algo más que eso.

Ya en el interior del santuario de Strange, vieron en el Orbe de Agamotto a Franklin torturado por los demonios, quienes perciben que están siendo observados por Reed. Strange le da a Reed instrucciones para un hechizo para liberar a sus compañeros; pero, Mr. Fantástico vuelve a hacerlo sin convicción, consiguiendo solo causar dolor a sus amigos y golpear a Doom, quien se da cuenta que algo raro pasa y asume que Richards está tratando de manejar la magia. En el santuario de Strange, este recrimina a Reed, por negarse a creer en la magia.

Al llegar a la biblioteca, Doom vio que Reed ya no estaba y dedujo que Strange tenía algo que ver con lo ocurrido. De inmediato, fue en busca del cuerpo físico de Strange y lo incapacitó, lo que hizo que la forma astral de este se desvaneciera, aunque no antes de que pudiese entregar a Reed un dispositivo místico, que Mr. Fantástico tendría que deducir cómo usar. Tras varios intentos inútiles, Reed empezó a insultarse a sí mismo, admitiendo que era un idiota. Fue en ese momento, que el dispositivo funcionó y una sonrisa se dibujó en el rostro del héroe. Mientras tanto, Doom enviaba a Strange al infierno, para que fuese torturado por los 3 demonios, al igual que Franklin.

El Doctor Doom se teletransportó hasta el santuario de Strange junto a Valiera, encontrándose con los 4F ya liberados y siendo sorprendido por una descarga mística que lo afectó, permitiendo que Reed rescatase a la pequeña y la dejase en lugar seguro, mientras los otros 3 atacaban sin descanso al villano, no dándole opción a un respiro. Sin embargo, este contraatacó e inhabilitó a los 4 y puso una mordaza a Reed, para que este no pudiese pronunciar los hechizos; pero, el héroe ya se había dado cuenta que no necesitaba pronunciarlos, así que solo lo imaginó y derribó a Doom con una descarga mística y un tremendo puñetazo que lo envió de vuelta al santuario de Strange.

Doom seguía echándole la culpa de todo a Reed, quien le contestó que lo había sobrestimado como villano; pero, que en realidad no tenía ni el poder para devolverle a su hijo, que era solo un remedo de mago y que le daba pena, pues se creía la gran cosa, cuando en realidad le debía todo a los 3 demonios, que eran sus superiores. Doom contestó que él no le debía nada a nadie, lo que fue escuchado por los 3 demonios, pues el Orbe de Agamotto se los permitía. Reed lanzó entonces el Orbe hacia Doom y los demonios salieron y lo capturaron, llevándoselo al infierno, siendo seguidos por los 4F.

Los héroes rescataron a Franklin y a Strange, tras lo cual salieron, no así Reed, quien fue llamado por Doom, que le pedía que lo ayudase a salir, que sentía mucho lo que había hecho. Reed le contestó que no, que lo dejaría allí y que muy pronto lo olvidaría. En respuesta, Doom dijo que lo dudaba mucho, tocó el rostro de Reed y le deformó la mitad de la cara con la energía mística que le quedaba.

La experiencia había sido traumática para todo el grupo; pero, los más afectados en definitiva eran Franklin y Reed. El pequeño había perdido el habla y solo hacía dibujos grotescos; mientras que, la deformidad de su rostro, había hecho que Reed se apartara y permaneciera en la oscuridad en su laboratorio.

Sue y Ben, siguiendo el consejo del médico de Franklin, llevaron al pequeño a pasear y a hacer cosas con las que habitualmente disfrutaba; pero, nada parecía sacarlo de su ostracismo. Al menos fue así hasta que el público del parque de distracciones en que se hallaban los reconoció y los rodearon para pedirles autógrafos. En un momento determinado, Franklin estalló, furioso, e incluso se lanzó sobre un chico, cuya madre llamó a la policía. Ben tuvo que ahuyentar a la gente, pues por la reacción de Franklin, empezaban a exhaltarse; y luego, cuando llegó la policía, tuvo que explicarles lo que pasaba con el pequeño.

Cuando Sue y Ben trataron de tranquilizar a Franklin, este se exhaltó aún más, pues para él, mentían cuando le decían que estaban para cuidarlo, para mantenerlo a salvo. Fue entonces que algo en los ojos del pequeño les hizo darse cuenta que él pensaba que aún estaba en el infierno. Sue proyectó entonces un amplio campo de invisibilidad alrededor de ellos, para que nada perturbara al pequeño, mientras Ben le hablaba, aunque al principio, lo que dijo molestó a la Mujer Invisible, pues el héroe reconoció que era cierto que jamás estaría a salvo.

Ben aclaró que lo decía porque en definitiva, el mundo en el que vivían no era seguro y empezó a hablar acerca de la experiencia de su vida y el trauma que le había causado el convertirse en una mole de roca y que él bien pudo dejarse llevar por la frustración; pero, optó por otro camino, junto a sus padres y su tío y que si bien no podía ofrecerle mantenerlo siempre a salvo, él ya sabía que su tío jamás se rendiría por protegerlo, como lo había hecho desde el día en que nació. Terminó diciendo que la seguridad no era para tanto, si la vida valía la pena de correr el riesgo. La mente del pequeño pareció despejarse y abrazó a su madre.

Mientras tanto y tratando de sacar a Reed de su encierro, Johnny lo llevó hasta la máquina del tiempo. El joven portaba un arma. Retrocedieron en el tiempo, hasta la juventud de Doom en Hungría. Johnny le dijo que tenía ahora la oportunidad de desquitarse de todo lo que el villano les había hecho, eliminándolo antes que este se convirtiese en una amenaza. Reed tomó el arma, apuntó y finalmente dijo que no podía hacerlo. Johnny le dijo que era obvio, pues sabía que Reed no era un asesino y que lo importante era que reaccionara, que no permitiera que lo que pasó lo paralice, pues si eso ocurría, Doom habría triunfado.

Tras escuchar esto, Reed tomó el arma y disparó, fallando aparentemente. Johnny quemó el arma y llamó la atención a su cuñado, quien le hizo ver que el disparo había tenido una razón: en el suelo había un mechón de cabello de Doom y ahora, Reed tendría algo en qué trabajar.

Estas historias fueron publicadas originalmente en Fantastic Four Vol. 3 #  67 al 70 y # 500 al 502 USA (Mayo a Octubre del 2003); y, en español en formato grapa en la colección de Los 4 Fantásticos de Panini y en formato tomo, como parte de la colección Marvel Héroes de Panini. Imagen cortesía de colección privada, de la portada del tomo de Marvel Héroes.

              ¡EL COMIC ES CULTURA Y EDUCACIÓN!

Comic Club de Guayaquil… ¡de Guayaquil para el mundo entero!

email: ecuadorcomics@gmail.com
http://comicclubguayaquil.blogspot.com/

Facebook: Comic Club de Guayaquil

Twitter: @COMICCLUBGYE


 

No hay comentarios: