sábado, 26 de mayo de 2018

JLA: EL ÚLTIMO DIOS ENFURECIDO.



JLA: EL ÚLTIMO DIOS ENFURECIDO.

“The last angry god!” publicada originalmente en Justice League of America # 115 USA (Febrero de 1975), siendo desarrollada por Dennis O’Neil (guión), Dick Dillin (arte), Dick Giordano (tintas) y Carl Gafford (color), con portada de Nick Cardy.

Batman se encontraba de guardia en el satélite de la JLA y dio la alerta sobre una nave que se acercaba peligrosamente. De inmediato, acudieron Green Lantern y Superman, quienes detuvieron la nave y para su sorpresa, se encontraron con que en su interior estaba J’onn J’onzz, el Detective Marciano.

J’onn había abandonado la Tierra tiempo atrás, al encontrar a otros sobrevivientes de Marte, su planeta de origen y juntos, habían ido en busca de un nuevo mundo que habitar. Allí, se toparon un día con una misteriosa puerta en la ladera de una montaña. Intrigado, J’onn la abrió y una mano gigantesca lo golpeó.

De las entrañas de la montaña, salió Korge, quien dijo ser el dios de la rabia y que estaba furioso por haber permanecido encerrado. Ya libre, atacó a los marcianos, que se defendieron bien y parecía que iban a ganar, cuando el cuerpo del gigante se envolvió en llamas, lo que de inmediato debilitó a J’onn y los demás. Así, los llevó hasta el poblado que los marcianos habían construido. Allí, le dijo a J’onn que había leído su mente y había visto imágenes de la Liga de la Justicia, así que le ordenó que fuere en su busca y los llevara al planeta para enfrentarlos. Si no lo hacía, Korge mataría a un marciano cada día, hasta que J’onn cumpliera lo ordenado, por lo que no le quedó más que acceder.

Korge llevó al Detective Marciano al interior de la montaña, donde había un extraño aparato, como un conjunto de cabinas, a una de las cuales lo hizo ingresar, para dar el salto en el espacio, con la instrucción de no sacar la cabeza de la placa, pues de lo contrario, su esencia no sería transmitida.

Al terminar J’onn su relato, sus compañeros de la JLA no dudaron por un momento en acompañarlo. Green Lantern recuperó y reparó la nave en la que llegó J’onn, usando su anillo de poder. Luego, procedieron a embarcarse y ocupar los espacios en la cabina J’onn, Superman, Flash, Green Lantern y Atom, que se vieron de inmediato transportados al planeta que ahora habitaban los marcianos. Como científicos, a Atom y a Flash les intrigó el funcionamiento de la máquina.

Ya ante la puerta en la montaña, la JLA se dispuso a actuar y se adelantaron Flash y Green Lantern, quienes entraron, el uno vibrando y el otro, usando su anillo de poder, para atravesar la puerta sin abrirla. Flash sorprendió a Korge usando su supervelocidad, para crear un vórtice que lo desestabilizó, para luego correr hacia arriba por el cuerpo de este para golpearlo, aunque para ese momento, la piel del furioso dios se había vuelto escurridiza, por lo que los puños del velocista se deslizaban sin afectar a su rival, por lo que optó por bajar al suelo e intentar otra estrategia. Sin embargo, el suelo también estaba resbaloso, por lo que se le dificultó correr, lo que Korge aprovechó para darle un fuerte golpe con su mano y aventarlo, inconsciente, fuera del lugar.

Green Lantern atacó entonces, destruyendo las instalaciones alrededor de Korge, asumiendo que de ellas extraía su poder, lo que pareció dar resultado, así que decidió noquear al gigante con su típico guante de boxeo proyectado por su anillo; pero, justo en el momento que el rayo verde tocó el rostro de este, el guante se volvió amarillo y el propio rayo se volvió totalmente de ese color, hasta que, al llegar al anillo, causó una sobrecarga que lo dejó inconsciente y Korge lo lanzó fuera del lugar.

Cuando Atom, J’onn J’onnz y Superman vieron a GL, notaron que incluso su anillo se había vuelto amarillo. Sabiendo que Flash y GL eran muy hábiles e imaginativos y que eso de nada les había servido con Korge, el Hombre de Acero decidió atacar con pura fuerza bruta y a punto de demoledores golpes consiguió derribarlo y ya estaba a punto de liquidarlo, cuando el gigante tomó una gran roca, que comenzó a brillar, hasta convertirse en kryptonita y la lanzó contra el héroe, que quedó inconsciente.

Triunfante, Korge salió llevando a Superman y la kryptonita, exhibiendo al Hombre de Acero como trofeo, ante la mirada impotente de los demás, que no sabían qué hacer, aunque Átom urgió a pensar algo, pues si su compañero seguía expuesto a la mortal radiación, moriría en pocos minutos. Flash dedujo entonces, que Korge podía leer las mentes de quienes lo atacaban; pero, solo cuando entraba en contacto con ellos, lo que le permitía alterar los elementos para vencer a sus oponentes. Sin embargo, eso parecía servirles de muy poco en ese momento.

El más molesto era Átom, pues sentía que sus poderes no contribuían en nada en esta misión, hasta que recordó lo que J’onn había contado sobre el aparato en el que había viajado, acerca de que “transmitía esencias” y siendo la esencia de los superhéroes sus superpoderes, pidió ayuda a Flash para hacer unos arreglos en el artefacto. Tras unos minutos, los 4 héroes ingresaron a la cabina, aunque no se transportaron lejos, sino que volvieron a salir poco después y se dirigieron a enfrentar a Korge.

Cuando Korge los vio, se burló de ellos, golpeó a Green Lantern sabiendo que su anillo estaba inutilizado, rodeó de fuego a J’onn J’onnz, obligó a Flash a correr sobre un mismo sitio, para luego retar a Átom a demostrar su poder. Sin embargo, el pequeño titán se limitó a gritar “¡Ahora!”, tras lo cual J’onn atravesó el fuego como si nada, Green Lantern se encogió, el propio Átom se agrandó y Flash demostró gran fuerza al lanzar lejos la roca de kryptonita.

Luego, J’onn corrió a supervelocidad, generando un vórtice que desestabilizó a Korge, tras lo cual Atom y Green Lantern lo golpearon con gran fuerza, ante lo cual el gigante no atinaba a cómo reaccionar, ni podía acumular fuerzas. Finalmente, Atom lo noqueó con un fuerte puñetazo. Se había acabado la furia del dios enfurecido.

Tras asegurarse que Superman empezaba a recuperarse, los 4 volvieron a la cabina y regresaron para explicar al Hombre de Acero cómo habían vencido a Korge. Al darse cuenta que este era capaz de neutralizar sus habilidades, usaron el dispositivo del gigante para intercambiar sus esencias. Así, Green Lantern era en realidad Atom, Flash era Green Lantern, J’onn era Flash y Atom era J’onn J’onzz., lo que les permitió tomar por sorpresa a Korge.

El Detective Marciano les agradeció por haber salvado a su pueblo y a él, a lo que Atom contestó algo que antes le había dicho, que los integrantes de la Liga de la Justicia eran sus compañeros y aceptaban el riesgo por él.

Esta historia fue publicada en español en formato grapa en Círculo Justiciero # 13, de Editorial Vértice de España, en Julio de 1979, con portadas en color e interior en blanco y negro. En la versión de Vértice, a la Liga de la Justicia se la llamaba Círculo Justiciero y la portada fue recreada por Rafael López Espí, una costumbre habitual en esa época. El Justice League of America # 115 USA, nunca fue publicado por Novaro de México. Como complemento en la edición española, se incluyó el relato “Una simple historia”, así como una reseña narrada por los integrantes de la Liga acerca de “Amazo y su creador” y la historia del “Tren de la Libertad”. Imagen cortesía de colección privada.

¡EL COMIC ES CULTURA Y EDUCACIÓN!
Comic Club de Guayaquil… ¡de Guayaquil para el mundo entero!
email: ecuadorcomics@gmail.com
http://comicclubguayaquil.blogspot.com/
Facebook: Comic Club de Guayaquil
COMICCLUBGYE en Youtube
Twitter: @COMICCLUBGYE

No hay comentarios: