¡LA LLEGADA DE
GALACTUS!
Esta
historia fue publicada originalmente en Fantastic Four # 48 al 50 USA (Marzo a
Mayo de 1966) y fue realizada por Stan Lee (guión), Jack Kirby (arte) y Joe
Sinnott (tinta).
Para
1966, Lee y Kirby tenían ya casi 5 años desarrollando un universo de seres
fantásticos, muchos con grandes poderes de un nivel muy superior al que el
común de los mortales podría jamás imaginar (aunque algunos de ellos eran
personajes secundarios que aparecían ocasionalmente y rara vez intervenían en
el destino de la humanidad); pero, aún faltaba más. Faltaba aún un ser
omnipotente, que estuviera más allá del bien y del mal y que su mera presencia
marcara el posible destino fatal de millones de seres vivos; un ser que
consumiera mundos para subsistir.
Stan
Lee le planteó esta idea a Kirby y poco después, este le llevó 20 páginas
dibujadas, en las que resaltaba un personaje plateado que viajaba sobre una
especie de tabla de surf y que servía de guía al personaje todopoderoso, llamado
Galactus, en su búsqueda de mundos con los cuales saciar su hambre. Y a Lee le
sonó muy lógico el planteamiento de Kirby de que este ser todopoderoso,
necesitara de alguien que se encargara de buscar y seleccionar el mundo ideal a
ser consumido. Lee se encargó de darle un origen y una historia a este
personaje y así surgió el Silver Surfer (Estela Plateada en la versión
española, Deslizador de Plata en versiones mexicanas). El origen de Galactus
quedaría como una incógnita durante varios años.
Como
dato interesante, para la reedición que hizo Forum en España a inicios de 1990,
se escogió al artista español Carlos Pacheco para que hiciera nuevas portadas
para los dos números de Clásicos Marvel en los que se imprimiría la historia.
Como datos interesantes, en la portada del # 18, se ve el anuncio de una
próxima película de los 4F, quizás refiriéndose a aquella que llegaría a
filmarse a inicios de esa década, aunque nunca llegaría a los cines por su
pésima calidad; mientras que, en la portada del # 19, se ve varios diarios que
anuncian que la Tierra se ha salvado de Galactus y puede apreciarse claramente
la portada del Daily Planet y se insinúa a la izquierda la del Gotham Gazette,
ambos de DC (ver imagen adjunta).
Los
4 Fantásticos y los Inhumanos habían conseguido detener los planes de Máximus,
el rey loco, hermano de Black Bolt (Rayo Negro en la versión española), quien desde
el Gran Refugio ubicado en los Himalayas, planeaba destruir a la humanidad.
Maximus
había activado su proyecto Atmos, que emitía una descarga que aniquilaría a
todos los seres humanos del planeta; sin embargo, la descarga no tuvo más
efecto que el susto entre todos. Al ver su fracaso y antes de ser detenido,
Maximus activó otro dispositivo, que generó una barrera o Zona Negativa
alrededor del Gran Refugio, que impediría que nadie entrara o saliera del
lugar. Los 4 Fantásticos salieron con el tiempo justo, a pesar de la renuencia
de Johnny Storm que no quería abandonar a su amada Crystal.
Mientras
regresaban a casa en su avión, Johnny pidió a Reed Richards que buscara la
forma de pasar la barrera. Casi estaban llegando, cuando Ben pudo apreciar a
través de las ventanas de la nave, lo que parecían ser dos soles. De pronto, el
cielo pareció estallar en llamas.
En
ese mismo momento, en lo profundo del espacio, un ser conocido como Silver
Surfer, recorría los confines del Universo, en busca de algo. Al acercarse a
los dominios del imperio Skrull, los encargados de vigilar la seguridad, dieron
la orden de un apagón total, para evitar ser detectados por el heraldo de
Galactus, al cual aún ellos temían.
En
cuanto aterrizó la nave de los 4F y a pesar de la advertencia de Reed, la
Antorcha Humana salió volando para intentar calmar a la gente que empezaba a
entrar en pánico; pero, ni bien lo vieron sobre las calles de New York, todos
reaccionaron acusándolo de ser el culpable y lo atacaron lanzándole ladrillos y
con una manguera a presión, lo que hizo que sus llamas se apagaran. La Antorcha
Humana no cayó al pavimento, pues alcanzó a agarrarse de un poste de luz, hasta
donde subieron algunos furibundos ciudadanos para obligarlo a bajar y
agredirlo.
Los
4F iban al rescate en su ciclojet y Ben Grimm se adelantó, dejándose caer a la
calle. Su presencia ahuyentó a casi todos, menos a un matón que quiso
enfrentarse a puño limpio con él, aunque no terminó precisamente bien en su
intento. De pronto, el cielo volvió a la normalidad como si nada hubiese
pasado, Reed decidió regresar al laboratorio para investigar lo que ocurría.
Mientras tanto, el Silver Surfer llegaba ya al sistema solar y asumía que
habría allí un planeta que pudiera saciar el hambre de Galactus.
Pasaron
varias horas y Sue estaba preocupada y molesta porque su marido no salía del
laboratorio (y porque no le pretaba atención). Justo en ese momento, Johnny y
Ben vieron que ahora el cielo parecía estar cubierto de escombros espaciales.
Sue consiguió entrar al laboratorio de Reed y se sorprendió ver allí al
Vigilante, miembro de una antigua raza extraterrestre, dedicados a observar y
registrar todo lo que ocurra en el Universo. Vigilante había sido quien había
creado los dos fenómenos avistados en el cielo, tratando de ocultar la Tierra,
para que no fuera encontrada por el Silver Surfer y había fracasado, ante lo
cual el destino del planeta estaba sellado.
Silver
Surfer llegó y se posó en lo alto del edificio Baxter y lanzó una señal. Ben
Grimm se acercó por detrás y le asestó un tremendo golpe, haciéndolo caer al
vacío; pero, ya era tarde, pues Vigilante avisó que Galactus había llegado.
Casi de inmediato, apareció una gigantesca nave, de la que bajó Galactus, quien
advirtió que la Tierra serviría para saciar su hambre.
El
Vigilante se acercó a hablar con Galactus, intercediendo por la Tierra,
considerando que se trataba de un planeta con vida inteligente, no como otros
que el omnipotente ser había consumido, que eran mundos sin vida. A Galactus no
le importaba eso, pues para él eran detalles menores y lo que importaba era su
supervivencia de él, un ser supremo. El Vigilante le advirtió que los
terrícolas no eran seres tan débiles como podría pensarse y justo en ese
momento, Ben Grimm atacó con un poderoso golpe, que no hizo mella en el
gigantesco ser, que dejó caer una granada que afectó a la Cosa, quien tuvo que
ser rescatado por Reed y llevado al interior del edificio, junto a Sue.
Sin
embargo, no todos entraron, pues la Antorcha Humana no quiso irse y atacó con
todo su poder, que fue simplemente absorbido por Galactus, que luego lo
devolvió con una descarga que afectó los electrtrones de las llamas de Johnny,
cubriéndolo de cenizas que lo hicieron apagarse y el Vigilante le aconsejó ir
con los demás.
Mientras
tanto, Silver Surfer recuperaba la conciencia luego del golpe que le diera Ben.
Él había caído en la azotea de un edificio que resultó ser donde vivía Alicia
Masters, quien lo recibió, lo atendió y le ofreció de comer. Tocando su rostro, Alicia sintió que
Silver Surfer era alguien con mucha nobleza y el hombre del espacio empezó a
sentir algo que jamás habría imaginado: las emociones humanas. Paralelamente,
Galactus empezaba a montar una maquinaria gigantesca sobre el edificio Baxter y
el Vigilante explicó a los 4F que primero, dicho artefacto vaporizaría el agua
de ríos y mares, transformándola en energía que el extraño ser pudiera absorber
y luego, le tocaría a las masas terrestres, hasta que solo quedara un cascarón
si vida y después, solo escombros.
Parecía
que no había salvación para la humanidad; pero, el Vigilante les ofreció una
opción, aunque el único que podría llegar hasta donde estaba el dispositivo que
podría salvar a la Tierra, era la Antorcha Humana. Los demás, deberían ganar
tiempo conteniendo a Galactus. Así, mientras el Vigilante enviaba a Johnny a
una peligrosa misión a través de la distorsión espacio temporal, los demás
causaban estragos en la maquinaria de Galactus, que tuvo que llamar a su
sirviente el Castigador, un ser de gran poder a pesar de su pequeño tamaño y
que contuvo a los héroes.
Paralelamente,
las palabras de Alicia Masters calaban hondo en Silver Surfer, quien al
principio pensó en eliminarla; pero, luego comprendió el valor de proteger a la
vida y aceptó la posibilidad de desafiar al mismo Galactus y se presentó ante
él, descargando todo su poder y encerrándolo en una coraza de energía que no
duró mucho, pues el omnipotente ser se liberó pronto. Silver Surfer siguió
atacando y advirtió a Galactus que debía dejar en paz a la Tierra y que ya no
era más su heraldo.
Pero
el Vigilante sabía que el poder de Silver Surfer no era rival para Galactus, ni
sería capaz de convencerlo, pues el omnipotente ser estaba más allá del bien y
del mal y tan solo hacía lo que pensaba era algo normal. Justo en ese momento,
llegó Johnny Storm totalmente exhausto y cayó desmayado ante los demás. Él
traía el llamado Nulificador Supremo, un arma tan poderosa que debía ser
manipulada con mucho cuidado, pues un error podría significar la destrucción de
todo el Universo.
Reed
blandió el arma ante Galactus, quien quedó horrorizado que una criatura de
frágil mente manipulara tal poder y acusó al Vigilante de ser irresponsable, a
lo que este respondió que era una acción justa y que debía reconocer el valor
de los habitantes del planeta. Galactus aceptó irse, sin resentimientos, a
cambio de que le fuera entregado el Nulificador Supremo.
Antes
de irse, Galactus castigó al Silver Surfer quitándole sus poderes para viajar
por el espacio y confinándolo a la Tierra. Tan pronto como Galactus se fue,
todo volvió a la normalidad, incluyendo los conflictos personales de los
héroes.
Así,
Ben se deprimía por las atenciones que Alicia tenía con el Silver Surfer,
aunque este emprendió un viaje alrededor de la Tierra para conocer su nuevo
hogar; Sue volvió a discutir con Reed porque este no le prestaba atención;
mientras que, Johnny iniciaba sus estudios universitarios, lo que esperaba lo
ayudara a olvidar a Crystal y allí conoció a quien sería no solo un gran amigo,
sino también un aliado de los 4F, Wyatt Wingfoot.
Esta
historia fue publicada en español en formato comic grapa por Editora Forum em
los # 18 y 19 de la colección Clásicos Marvel; en formato tomo como parte de la
colección Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos por Editora Forum; y, en formato
tomo omnibús por Panini en la colección Marvel Gold. Imagen cortesía de
colección privada.
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