LOS 4 FANTÁSTICOS: EL
VIAJE DE SIMBAD.
Esta
historia fue publicada originalmente como Fantastic 4th The Voyage of Sinbad
/Septiembre del 2001) y fue realizada por Chris Claremont (guión), Pascual
Ferry (arte) y Scott Hanna (tintas).
Es
una noche como cualquier otra, salvo por la niebla, tan tupida, que los
metereólogos no encuentran explicación y ha hecho que cierren los aeropuertos,
que el tráfico se haya detenido en casi todas las autopistas y que los
guardacostas hayan prohibido que zarpen las naves.
En
el Espigón 4, que ha sido la base de los 4 Fantásticos luego de su regreso tras
una aparente muerte ante Onslaught, todo es alegría porque ha concluido el
período de claese y han vuelto a casa Franklin y Valeria (hija de Sue y el Dr.
Doom en una realidad alterna), acompañados por su cuidadora Caledonia. Y en
medio de la niebla, una extraña nave se acerca al Espigón.
Una
vez que todos se han ido a dormir, la niebla ingresa al edificio y se reparte
por todo el lugar. Al llegar a la habitación de cada uno de los héroes, la
niebla se convierte en avatares, que los atacan. Johnny Storm es atacado por un
avatar de fuego, Ben Grimm por uno de tierra, Sue por uno de aire y Reed por
uno de agua. Los esfuerzos de los 4 Fantásticos son inútiles ante los avatares,
hasta que al darse cuenta de que cada uno responde a sus poderes específicos,
cambian de rivales y así consiguen vencer. Luego, se dirigen en busca de los chicos,
a los cuales los ataca una hidra.
Los
héroes atacan a la hidra y de pronto se revela ante ellos un poderoso hechicero
llamado Jihad, que les asegura que se arrodillarán ante él y en un descuido, la
hidra golpea a todos y quedan inconscientes. Cuando despiertan horas después,
se encuentran en un dromond, un barco árabe de uso comercial y todos han sido provistos
de vestimenta adecuada, además de contar con provisiones para un largo viaje y
cartas de navegación, que aunque están en árabe, son rápidamente descifradas
por Valeria.
Gracias
a las cartas de navegación, descubren que viajan en el barco de Simbad el
marino, lo cual no deja de entusiasmar a Ben, que es un fanático del personaje.
Valeria y Ben les dicen a los demás que han sido enviados a conseguir 4
objetos: el ojo para contemplarlo todo, la mano para asirlo todo, el cofre de
cristal para contenerlo todo y el mazo del destino para liberar los deseos del
corazón. Reed comenta que es obvio que las intenciones de Jihad no sean
honorables; pero, que por el momento no queda más que seguir el juego.
Todos
se aprestan para emprender la aventura. Parado junto a la proa, Ben promete a
Simbad que llevarán su barco a puerto cueste lo que cueste y le ganarán a
Jihad. Tras esas palabras, Ben no alcanza a ver que de los ojos del mascarón de
proa salen lágrimas.
El
primer lugar al que viajan es una ciudad flotante de cristal puro, en la que se
encuentra el cofre de cristal para contenerlo todo. La ciudad refleja la luz de
tal manera, que tanto la Antorcha Humana como Reed terminan deslumbrados y
asumen que lo mismo le ocurrirá a Ben, por lo cual la más adecuada para la
misión es Sue, quien usa su poder de invisibilidad y de proyección de campos de
fuerza para acceder a la ciudad y apoderarse del cofre.
El
segundo viaje es al territorio de un Califa que posee el guante para asirlo
todo, donde Reed juega con él una particular partida de ajedrez, con figuras
reales y donde está en juego la suerte de Sue, pues si el héroe pierde, ella
pasará a formar parte del harén de su oponente. Tras unas hábiles jugadas, Reed
le hace jaque mate al Califa y se lleva el preciado guante.
El
tercer viaje es al templo de Iblis, madre de los d’jinns y demonios, donde
Reed, Sue y Johnny quedan transformados inicialmente en una especie de demonios
y luego en estatuas de piedra. Ben empieza a derribar el templo e Iblis se
burla de él, pues con su acción, aplastará a sus propios amigos; pero, la Cosa
soporta el peso del techo sobre sus espaldas y sin abrir los ojos para no caer
en el hechizo de la criatura mítica, lo levanta lo suficiente para permitir el
paso de los rayos del sol, que se reflejan en el piso que ha sido convertido en
espejo por acción de las llamas de la Antorcha Humana. Cuando Iblis ve su
imagen reflejada en el suelo, queda transformada en piedra y su hechizo se
desvanece, recuperando su forma los héroes y permitiendo que Ben tome el Mazo
del Destino.
Cuando
se dirigen en busca del cuarto objeto, la nave es atacada por un Ruc, ave
gigantesca que captura a Johnny. Los demás siguen al ave en el dromond y se
encuentran con que la isla donde anida la criatura, es justo la isla donde está
“el ojo que todo lo ve”. Luego, llegan hasta un templo donde hay una estatua
gigantesca que tiene “el ojo que todo lo ve” en la frente y en cuyo regazo está
el nido del Ruc.
Sue
aplica su poder de invisibilidad sobre Reed, Ben y ella y así suben en busca
del objeto que falta. En eso, el nido del Ruc empieza a arder, asustando al ave
que huye con sus crías y así los héroes consiguen “el ojo que todo lo ve” y
regresan al barco; pero, se encuentran que Jihad ha atrapado a Caledonia y a
los chicos y los ha transformado en madera. Jihad dice a los 4 Fantásticos que
si no entregan los objetos, los chicos no volverán a la normalidad. Ben nota
que junto a los chicos, Jihad sostiene en sus manos la figura del mascarón de
proa y cuando Reed entrega los objetos, se lanza y atrapa la talla de madera, cayendo
al agua, mientras el maligno hechicero ríe ante la actitud de la Cosa y se va,
ante la indignación de Sue, que no entiende lo que hizo Grimm, perimitiendo que
Jihad se lleve a sus hijos.
Sin
embargo, la expresión de Sue cambia cuando Ben sale del agua, acompañado de
Simbad, que hasta ese momento, había permanecido transformado en el mascarón de
proa del dromond; pero, que el contacto con la Cosa lo volvió a la normalidad.
Simbad
se disculpa por todo lo que han tenido que pasar los 4 Fantásticos; pero, les
dice que desde que se enteró de la existencia de su mundo y cuando Jihad no
solo que secuestró a su amada hija Dioné y pretendió conquistar todo el mundo,
el mítico héroe le ofreció la posibilidad de conquistar otro, teniendo la
esperanza de que con la ayuda de los héroes, podría acabar con la amenaza y en
el momento decisivo, influyó en la mente de Ben para que lo liberara. La única
forma de salvar no solo a las dos familias, sino a dos mundos, depende ahora de
trabajar en conjunto.
Como
el dromond ha sido destruido, Reed se estira y alcanza a un Ruc, al que se
suben todos y llegan a la ciudadela de Jihad, que es servida por un ejército de
primates. Jihad se encuentra realizando las invocaciones para usar el poder de
los 4 objetos míticos, cuando un campo de fuerza de Sue impide que el villano
rompa el cofre de cristal con el mazo del destino. Simbad, Reed, Ben y Johnny
combaten a los primates, mientras Sue mantiene el campo de fuerza, para evitar
que Jihad adquiera el control total de los artefactos, aunque este se burla de
ella, diciendo que su escudo no podrá resistir por siempre.
Sue
decide entonces crear un campo de fuerza alrededor de la cabeza de Jihad,
asumiendo que aún él necesita respirar y lo achica para quitarle el aire al
máximo, lo cual es aprovechado por Reed para lanzar a Ben con su cuerpo
elástico con tal impulso, que el puñetazo derriba al villano, que sin embargo,
no está acabado, pues Johnny le lanza sus llamas; pero, el hechicero las
absorbe y las devuelve contra todos.
Ben
vuelve a golpear con tal fuerza, que lanza a Jihad por el aire. Simbad entrega
un objeto a cada uno de los héroes e invocando a Alá y al espíritu de los
chicos (Franklin, Valeria, Caledonia y Dioné), pues ellos son la clave para la
salvación, hacen que Ben consiga eliminar a Jihad del plano de la existencia,
con un certero golpe del mazo del destino. Caído el villano, los chicos vuelven
a la normalidad.
Agradecido,
Simbad y Dioné llevan a todos de vuelta a New York sin que haya pasado ni un
minuto desde que se fueron. Simbad le dice a Ben que ambos son como dos
hermanos y junto a Dioné, le obsequian un talismán con el que el héroe mítico
conquistó a su amada y para que siempre recuerde, en el mundo mágico habrá
siempre alguien que lo querrá como parte de su familia.
Ben
guardará el talismán como un tesoro; pero, recordando siempre el tesoro que ya
tiene con su familia: los 4 Fantásticos.
Este
comic fue publicado en español en formato comic grapa por Editora Forum. Imagen cortesía de
colección privada.
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